Había en Mitla un cuerpo de sacerdotes denominado de los copavitoo, los cuales seguían haciendo sacrificios en honor del Huijatoo. Sorprendidos en estas prácticas, se les obligó a suprimirlas. Emigraron por eso a Tehuantepec y pidieron asilo a Cosijopii, en cuya mansión siguieron sus prácticas a las altas horas de la noche, para no ser sorprendidos, pero, fueron denunciados y descubiertos. Extrañaron aquello los comisionados de la autoridad, porque se creían a aquellos indios convertidos realmente al catolicismo. Seis de los sacerdotes fueron reducidos a prisión y Coaijopii quedó encerrado en el convento de San Bernardino. El pueblo quería sublevarse pero Cosijopii lo disuadió de tal intento.
Sometido el Rey a la autoridad de la Real Audiencia, porque rehusó, por su rango, aceptar la jurisdicción de los nombrados para juzgarlo. Dicha Audiencia lo condenó a la pérdida de todos sus bienes. Al regresar a Tehuantepec, murió en el camino de congestión cerebral. Los seis sacerdotes fueron ejecutados en auto de fe, espectáculo execrable ideado por la Santa Inquisición. Historia Científica de Oaxaca. del Lic. Manuel Brioso y Candiani.
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